Los políticos que llegan a la cima del poder generalmente lo hacen con muchos secretos, secretos que manejan con su círculo más cercano y que solo conocen dos o tres personajes que en muchas ocasiones terminan siendo secretos oscuros y difíciles de tragar. En House Of Cards, Frank Underwood tiene muchos secretos con los que llegó a la cima, en un entramado conspirativo que incluyó el asesinato de dos personas de manos de Frank y el silencio de otros tantos incluyéndolos en su telaraña. Así, Frank se atrincheraba con Douglas Stamper, un sabueso seguidor de las fechorías de Frank que hasta el final lo amó y estuvo dispuesto a inmolarse. Doug, le conocía mucho a Frank de cómo se llega a la cima.
En nuestro país, muchos políticos se suben al poder gracias a jugadas no tan limpias que terminan convertidas en secretos para su círculo más cercano, personajes oscuros que acompañan sus campañas políticas buscando refugio, personajes que terminan premiados en embajadas que se reviven al gusto del presidente de turno, o practicantes y auxiliares o secretarias que terminan convertidas luego en alcaldesas como accidentes de la democracia o con tal poder que pueden ser fácilmente la mujer más poderosas del país, con el hermano dándose la gran vida como si se tratara de un magnate reconocido.
Nos preguntamos los de a pie entonces, que secretos guardaran esos personajes de sus jefes que llegaron al poder, que podrían revelar en caso de no ser premiados su lealtad de perrito faldero a niveles de ser directoras de gobierno o alcaldesas de una ciudad, sin mencionar como han premiado a quien no puede decir nada que no sea mencionar a su amo y jefe cada vez que se refiere en su gobernación que no arranca, y que solo sabe decir en los gobiernos del cambio bajo el mandato de su amo.
Es sabido que una forma de enriquecerse muy fácil luego de batallar para llegar, es la política, el poder en el estado, eso lo saben quiénes hoy gobiernan bajo el discurso del cambio, querían cambiar en una ciudad a los políticos de antes y en la presidencia querían cambiar la llamada derecha, como si para llegar no se hubiesen apoyado en los politiqueros de siempre, como si para llegar no hubiesen corrido la línea ética o conseguido apoyo en dinero de otros personajes que pueden resultar complejos y de dudosa reputación. Como si para llegar un hijo se hubiese dado la gran vida al estilo narco y que luego por un tema de cachos el país conociera la realidad de la famosa P en barranquilla, los viajes en avioneta junto a quien enviaron a Italia para ser embajador en un organismo especializado de la ONU que dirige las actividades internacionales encaminadas a erradicar el hambre. Una embajada que hace años Colombia no ocupaba, pero fue el mejor lugar que encontraron para ocultar y premiar a quien fuera un gran apoyo para llegar a la cima.
Gustavo cambia a la ministra de Educación con PhD y postdoctorado en Harvard, con experiencia en educación, joven y decente, para nombrar a un activista, fanático comunista con cero experiencia en educación y apenas con pregrado. El cambio perfecto de un gobierno mentiroso y lleno de activistas. Otro que guardara secretos y llevara mucho fanatismo al circo llamado gobierno Petro.
Ahora que se habla de constituyente, aparece un ex fiscal de tendencia de izquierda y que es aliado actualmente de quienes se llaman progresistas en Santa Marta y el en el país, una constituyente capaz de voltear posturas como la de Juan Fernando Cristo, un político curtido pero que sabe aprovechar sus oportunidades para aliarse al poder. Quien lo creyera, después de apoyar al viejito hoy entrar al gobierno del cambio.
