“El día que lo iban a matar, Santiago Nasar se levantó a las 5.30 de la mañana para esperar el buque en que llegaba el obispo”. Así como inicia Crónica de una muerte anunciada, podríamos titular todo el espectáculo que se está viviendo en Santa Marta, la ciudad más vieja de América y la primera que está por cumplir 500 años. El líder monumental del clan Caicedo sabía que su hermana no estaba habilitada para ser alcaldesa de la ciudad, sin embargo, y desaconsejando todo lo que le decían sus asesores, su nepotismo y egolatría pudo más para inscribir en el tarjetón a quien no podía, y de esa forma abrió un debate del que nadie sabe cómo va a terminar.
Creo que en Santa Marta no existe duda, que hasta hace un par de meses y antes de cometer la torpeza y brutalidad de colocar a la Paca como candidata, el que dijera Caicedo sería el alcalde de Santa Marta. Avalado con una gran maquinaria que incluye jueces, magistrados, fiscales, periodistas y muchos lideres en barrios que le caminan a la frase del cambio. Pero, los planes de Caicedo no fueron los que se dieron, y su idea de atornillar 4 años más para completar 16 en la alcaldía, cual clan de antes, no pudo ser como lo soñó, todo porque se le atravesaron personas como el Mono Martínez quien denunció la inhabilidad de la Paca, y ahí siguió el tropel de la única ciudad capital del país que aún no tiene alcalde declarado oficialmente.
No sabemos cómo vaya a terminar todo el lio que armaron en el clan Caicedo, porque los jurisconsultos tienen diferentes interpretaciones, y solo los organismos judiciales pueden tener la última palabra, sin embargo, el tema es tan complejo que los decanos de las facultades de derecho y exmagistrados no se ponen de acuerdo, cada uno ve el derecho a su modo o desde su óptica. Lo único cierto hoy, es que la ciudad más vieja de América vive un lio por culpa de un déspota y ególatra que pensó o que piensa que siempre vive por encima de la ley.
Todos en la ciudad sabían de la inhabilidad de la Paca, hasta el mismo Carlos Caicedo, pero siempre creyente de que la ley y las líneas éticas se pueden correr con miles de millones de ra$ones como logró que un juez amigo permitiera una inscripción atípica de cualquier personaje. Capítulo aparte merece decir si el ganador es el segundo en las votaciones, una votaciones muy apretadas.
El mierdero que armaron tiene al país con los ojos en una ciudad que solo se menciona por sus playas y Carlos Vives, una ciudad que no tiene un sistema de salud digno aun 12 años después del cambio, que no tiene empleos más allá de trabajar en la alcaldía o la gobernación. Petro ha pedido que se respeten los resultados de una elección que no debió tener la foto de quien no pudo ser inscrito en los términos de la ley, como todo izquierdista de este país siempre asumen como buena la justicia cuando falla a su favor, cuando no le es favorable dicen que es una burla al pueblo y que las mafias de antes quieren volver al poder, ese viejo discurso que aunque uno no lo crea, sigue calando en personas ajenas a la política y que siempre hablan de los de antes, olvidando que son 12 años del poder de los de ahora.
Santa Marta, a menos de 40 días para que acabe el año no sabe quién será el que lidere la celebración de los 500 años. Una ciudad que sigue sumida en el atraso de antes con los de ahora, que se han enriquecido a costillas del erario, y que viven sabroso como gusta a los llamados progresistas, pero que no dan oportunidades laborales más allá de ser contratista o perro e rico de Caicedo en la alcaldía o gobernación.